PROMOCIÓN DE LA SALUD
Cuando hablamos de promoción de la salud, esta es definida como la acción o el conjunto de acciones que buscan promover, impulsar, subir el nivel, destacar, facilitar el acceso, hacer más accesible el acceso de las actividades y los servicios de salud.
De acuerdo la Conferencia de Ottawa celebrada durante el año de 1986, la promoción de la salud consiste en proporcionar a los pueblos los medios necesarios para mejorar su salud y ejercer un mayor control sobre la misma.
La forma en que se define y entiende tanto la salud como la enfermedad se da en un contexto histórico determinado, se conciben como un proceso, que están mediadas tanto por una dimensión subjetiva como por una objetiva, para una mejor compresión se agrega el concepto o la idea de bienestar, y también al momento de abordar el tema de salud y enfermedad en el fondo estamos hablando de vida o de muerte.
La promoción de la salud va de lo micro a lo macro, es decir, va desde lo individual como cuando por ejemplo se aborda el tema de los hábitos saludables de una persona, luego se pasa a un grupo o una comunidad, cuando se revisan por ejemplo sus condiciones de vida y si están son dignas e incluso llegar a la población de un municipio o de una ciudad cuando se abordan proyectos o programas que se dirigen a toda su población.
Para llevar a cabo acciones de promoción de la salud, se requiere de trabajo interdisciplinario (como es por ejemplo Trabajo social, Arquitectura, Licenciaturas en Educación, Diseño grafico, Medicina, Psicología, Ingeniería Multimedia, Administración de negocios, Ingeniería de Datos, entre otras), interinstitucional (por ejemplo como una red de Universidades, de empresas o de comerciantes de una sector) e intersectorial (Universidad, Alcaldía y Empresas).
Entre las estrategias para la promoción de la salud podemos encontrar la elaboración e implementación de políticas publicas, creación de ambientes saludables (favorables o protectores), fortalecimiento de la gestión comunitaria, desarrollo de conductas de afrontamiento y de competencias sociales, ajuste a la pertinencia y oportunidad de los servicios de salud.
LA PREVENCIÓN DE LAS ADICCIONES.
En términos generales, nuestro Ministerio de Salud (1996) entiende por prevención un conjunto de actividades orientadas a evitar la ocurrencia de enfermedades específicas, cuyo objeto son los individuos o grupos sociales, que por sus características tengan una gran probabilidad de adquirirlas (es decir alto riesgo). A su vez, también se entiende por prevención las actividades desarrolladas por los trabajadores del sector de la salud dirigidas tanto a individuos y a grupos sometidos al riesgo de enfermedades específicas y orientadas a evitar que la enfermedad se presente o genere daños mayores.
La prevención tiene entre sus fines la identificación, control o reducción de los factores de riesgo biológicos, del ambiente y del comportamiento, para evitar que la enfermedad aparezca o se prolongue, ocasione daños mayores o genere secuelas evitables
La prevención busca entonces modificar los comportamientos que representen riesgo para la salud, usualmente es por medio de la acciones educativas el método utilizado para alcanzar dicho objetivo, para evitar los comportamientos de riesgo se requiere de acciones orientadas a disminuir los factores de riesgo, más la adopción de estilos y hábitos de vida saludables.
Una manera más amplia y detallada de entender que es la prevención sería hacer la consideración de unas cinco características básicas (Augusto Perez Gómez, 1987 y 2001) para entender que es la prevención, veamos un poco más en detalle:
- La prevención es un proceso activo y en doble vía, es decir, en el que participan activamente tanto quienes ejecutan las acciones preventivas, como la población objetivo de dichas acciones.
- Las acciones preventivas abarcan desde la implementación de planes o programas informativos, pasando a su vez por procesos de capacitación, también de presentación de alternativas o de estrategias de intervención.
- La prevención busca promover la creación de unas condiciones que reduzcan al mínimo posible la incidencia (número de casos nuevos de una perturbación dada, dentro de un determinado período de tiempo) y/o de la prevalencia (número total de casos de una perturbación, existentes en un momento y en un lugar dados).
- La prevención aborda temas que son relevantes para un entorno como es le consumo de sustancias psicoactivas y de las conductas adictivas, pero también puede referirse a otras problemáticas como serían los hurtos, los accidentes de tránsito, las enfermedades sean trasmisibles o no, entre otros temas.
- Las acciones preventivas también buscan cambiar las actitudes, valores y comportamientos, que favorecen las adicciones (Pérez Gómez, 1987 y 2001).
Las acciones preventivas que se pretendan desarrollar deben de tener en cuenta la población objeto de estas, es de considerar asuntos como la edad, la ubicación geográfica, si están o no en condición calle, si es una población vulnerable, el nivel educativo, el estrato socioeconómico, y sobre todo la incidencia y la prevalencia tanto del consumo de sustancias como de las conductas adictivas.
Se plantea que la prevención como tal tiene tres niveles, veamos cada uno de estos:
Prevención primaria: se refiere a las acciones tendientes a reducir el riesgo de un evento de enfermedad mediante disminución de los factores de riesgo, estas acciones se hacen antes de la aparición de una problemática de salud en si, se suele desarrollar con grupos poblacionales amplios.
Prevención secundaria: esta nivel hace alusión que dentro de una población ya se manifiesta alguna dolencia o enfermedad, se busca que esta no se agrave aún mas o se propague. Se puede combinar con acciones de intervención temprana o inicial.
Prevención terciaria: en este nivel, las actividades que van dirigidas a reducir y minimizar el sufrimiento, la duración, la incapacidad, y las secuelas de la enfermedad, los mismo que la adaptación a condiciones irremediables. Son dirigidas a individuos y grupos específicos.
Además de los tres niveles ya mencionados, también las acciones de prevención se pueden catalogar bien sea como especificas o inespecíficas. Las actividades de prevención especificas hacen alusión a que se aborda directamente el tema del consumo y de las adicciones, por ello se habla de manera directa de los términos, los mitos, las creencias, las causas y los efectos, los riesgos y demás, a su vez, las actividades denominadas como inespecíficas, hace alusión a que se abordan son los factores de riesgo y las posibles causas asociadas al consumo de sustancias y de las conductas adictivas, como son por ejemplo las fallas en la resolución de conflictos, no tener un buen uso del tiempo libre, las falencias en la comunicación familiar, la presión de grupo, entre otros.
Es de comentar que desde la década de los años 90 del siglo anterior, las acciones tanto de promoción como de prevención no solo tienen la mirada puesta en una sola persona o individuo en particular el foco si se quiere es la comunidad como tal, y se llega al concepto de la prevención integral la cual integra los tres niveles al igual que acciones tanto especificas como inespecíficas.
Antes de realizar acciones ya sean estas de promoción o de prevención, es de suma relevancia definir qué es lo que se pretende hacer, por ello las preguntas iniciales que nos debemos de hacer serían las siguientes:
¿Cuál es el problema?: la magnitud de la enfermedad o el factor de riesgo.
¿Por qué ocurrió?: pregunta por la causalidad.
¿Qué hacer?: pregunta por la intervención, pregunta por las acciones a desarrollar, donde se ubican las acciones individuales y colectivas.
¿Cómo hacerlo?: pregunta por la ejecución de las acciones, donde, cuando, con quien, con que, en la ejecución de las actividades.
Luego de las preguntas previas, se puede agregar las dos siguientes:
¿Qué se desea?: en términos de ideales colectivos del buen vivir.
¿Cuáles son las condiciones necesarias?: pregunta por los determinantes y las situaciones básicas para conseguir lo que se quiere.
Entre las acciones que se consideran preventivas encontramos entre otras las siguientes:
Demanda inducida: se refiere a la acción de organizar, incentivar y orientar a la población hacia la utilización de servicios de protección específica, detección temprana y la adhesión a los programas de control.
Protección especifica: es la aplicación de acciones y/o tecnologías que permitan y logren evitar la aparición inicial de la enfermedad mediante la protección, como son la vacunación, la prevención en salud oral, la atención al parto, la atención al recién nacido y la Planificación familiar en hombres y mujeres.
Detección temprana: son los procedimientos que identifican en forma oportuna y efectiva la enfermedad, facilitan diagnóstico temprano, tratamiento oportuno y reducción de duración y daño, evitando secuelas, incapacidad y muerte.
Una política de promoción de la salud tiene un sentido diferente al de una política de prevención y atención de la enfermedad. Sin embargo, las acciones de prevención y atención pueden y deben integrarse a una gran política de promoción de la salud.
En los programas preventivos se pueden identificar en principio seis énfasis, aunque en la praxis hay programas que recogen diversos focos de trabajo. En teoría, los programas los podríamos clasificar de esta manera:
1. Conocimiento y de información: sobre las causas, efectos, consecuencias, riesgos, y demás.
2. Afectivo: fortalecer la autoestima, la regulación emocional,
3. Rechazo: frente al consumo y las adicciones, decirle no, hasta aquí.
4. Habilidades para la vida: comunicación asertiva, pensamiento critico, toma de decisiones, empatía, resolución de conflictos, entre otros.
5. Protección y cuidado: entregue las llaves, conductor elegido, testeo de sustancias en lugares de consumo, regulación del tiempo y dinero destinado a una actividad.
6. Actividades extras: las que se hacen fuera de jornada académica o laboral, como son por ejemplo los entrenamientos planificados, las competencias organizadas, la participación en voluntariados, tocar instrumentos musicales, y demás.